Modelos Educativos







Un modelo educativo reviste una serie de visiones o teorías pedagógicas que integran a profesores y orientadores en la revisión, análisis y construcción de los programas de estudio, además de dirigir sistemáticamente el proceso de enseñanza y aprendizaje. A continuación se describirán los siguientes ejemplos de modelos educativos:
·        Modelo pedagógico.
·        Modelo pedagógico basado en las competencias.
·        Modelos enseñanza ciencias.
·        Modelos didácticos en la física.



Modelo pedagógico

Un modelo pedagógico consiste en la recopilación o síntesis de distintas teorías y enfoques pedagógicos, que orienten a las autoridades magisteriales en coordinación con la participación activa de algunos  docentes en la elaboración de los programas de estudios y en la sistematización del proceso de enseñanza y aprendizaje. Apoyados en otros  modelos educativos de otros países, y por supuesto tomando  en cuenta las fortalezas, debilidades y análisis estadísticos de sistema educativo. En otras palabras, un modelo educativo es un patrón conceptual a través del cual se esquematizan las partes y los elementos de un programa de estudios. Varían de acuerdo al período histórico, ya que su vigencia y utilidad depende del contexto sociopolítico.
Históricamente, el constructivismo es una corriente pedagógica basada en la teoría del conocimiento constructivista, que postula la necesidad de entregar a los estudiantes las herramientas necesarias, que le permitan al estudiante construir sus propios procedimientos para resolver una situación problemática, lo que implica que va a ser un conocimiento o aprendizaje significativo (MEP, 2017)





Modelo pedagógico basado en las competencias.

El modelo pedagógico basado en las competencias plasma una serie de metodologías como la indagación, congruente con los principios pedagógicos del socioconstructivismo, que visualizan el aprendizaje como un proceso continuo y progresivo, es decir, se concibe como un acto social inacabado y en constante evolución, que considera las vivencias, los sentimientos y los conocimientos previos de quienes aprenden y toma en cuenta aquello que es capaz de hacer la persona por sí misma y lo que sería capaz de hacer con la ayuda de los demás, para actuar en su realidad inmediata.
En concordancia con lo anterior, el informe del Decenio de la Educación para el Desarrollo Sostenible de la UNESCO (2012), establece el aprendizaje como un proceso participativo, reflexivo, social, sistémico, gradual y permanente en el que intervienen emociones, pensamientos, capacidades y disposiciones para enfrentar los desafíos en la vida diaria. Dicho proceso se da de manera interactiva, intencional y no intencional, influenciado por el contexto sociocultural de pertenencia. Por lo tanto, le permite a los docentes comprender como aprende el estudiantado, respetar sus ritmos y estilos de aprendizaje, en el momento de planificar la mediación y el desarrollo de su práctica pedagógica, se debe de tomar en cuenta las diferencias individuales de los estudiantes, y sobre todo la relación entre competencia y otros términos afines, es decir, conocimientos, aptitudes, habilidades, destrezas, capacidades e inteligencia.

Efectivamente existe una correlación entre cada uno de estos conceptos y las competencias,  pero que en si, cada uno de ellos por sí solo no lo es, se puede afirmar que son elementos constitutivos del concepto de competencia, en la enseñanza para la comprensión, considerando que la propuesta pedagógica debe ser participativa e integradora de estos planteamientos. Es por ello que las competencias antes de ser exclusivamente un método de evaluación, es además una propuesta que se desprende de las teorías pedagógicas cognitivas - significativas. Está claro que las inteligencias son procesos de pensamiento en relación a desarrollos cognitivos, y que las competencias son las formas que utilizan los individuos para aplicar estos procesos de pensamiento y desarrollo cognitivo en un contexto reflexivo, participativo en donde se fomenta la igualdad de oportunidad en el marco de la educación de calidad, como un saber hacer y un saber haciendo. Saber hacer, entendido como conocimiento aplicado en una realidad; hacer sabiendo entendido como apropiación – comprensión de la realidad.


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Modelos enseñanza ciencias

Los modelos de la enseñanza de las ciencias se pueden clasificar en modelos mentales, modelos materiales y modelos matemáticos. Los modelos mentales son representaciones plasmadas en la memoria episódica, en la cual  puede dilucidar, explicar, y predecir una situación, es decir son inestables ya que son generadoras en el momento y descartados cuando ya no son necesarios; analizándole cognitivamente, son modelos de trabajo desechables. Los modelos materiales, también se pueden identificar como prototipos, a ellos se tiene acceso empírico y han sido construidos para comunicarnos con otros individuos, se expresan a través de un lenguaje específico, como por ejemplo el de la química.  

También se cuenta con los modelos experimentales, que se utilizan de forma estandarizadas en las investigaciones biomédicas para modelar enfermedades o la acción de posibles remedios para ciertas enfermedades, que de igual manera sirve para conocer la toxicidad de una sustancia. Por otra parte están los modelos matemáticos, estas son ecuaciones construidas para describir la porción del mundo que se está modelando.



En el ciclo de mediación basado en la indagación, se establece un papel activo de los estudiantes, el cual, piensa en un problema o desafío personal o comunitario, comparte sus ideas, e indica sus conocimientos previos y se hace preguntas. Lo que permite la focalización en relación con el propósito de estudio. Realizan observaciones, experimentos, trabajo de campo y registran sus resultados, como parte de la exploración del propósito de estudio. En el proceso de la exploración se plantean y prueban predicciones, donde surgen evidencias como una producción de conocimiento que intenta una primera explicación en relación con el propósito de estudio. Analizan y reflexionan la relación entre sus ideas iniciales, predicciones o hipótesis y las contrastan con los resultados obtenidos y con la información considerada como válida en el ámbito científico, para su posterior aplicación en situaciones de interés personal o comunitario. Lo que fomenta el desarrollo de habilidades del pensamiento sistémico, la resolución de problemas, el uso de tecnologías digitales, así como la responsabilidad personal y social  de los estudiantes.  






Modelos didácticos en la Física.

La enseñanza de las ciencias en general y de la Física en particular, han estado designadas por diversas tendencias, entre las cuales podemos destacar diversas propuestas de innovación, algunas de ellas fundamentadas teóricamente, otras responden a intuiciones muy generalizadas, a un pensamiento docente espontáneo, que impone sus evidencias, escapando así a la reflexión crítica. Estos planteamientos teóricos están dejando paso a un esfuerzo de fundamentación y evaluación que une estrechamente la innovación a la investigación didáctica (Pérez y Valdés, 1996). 

En las prácticas educativas tendientes a la construcción del conocimiento científico, es fundamental considerar las ideas previas que poseen los estudiantes, para aprovechar sus vivencias, sentimientos, preconceptos o errores conceptuales, como insumos para el proceso de enseñanza aprendizaje.

La educación científica promueve el desarrollo de habilidades propias del quehacer científico, que generan la construcción dinámica y multidireccional de datos, información y conocimientos, que permiten a la especie humana conocer e interactuar con su entorno de manera personal y comunitaria (Programa de Física MEP, 2018). Cabe recalcar que se busca que el proceso enseñanza-aprendizaje se dé mediante la metodología constructivista, de tal manera que se enmarque en una educación de calidad, con igualdad de oportunidad, en donde el actor principal sean los estudiantes.

El proceso de enseñanza aprendizaje de las ciencias ha demostrado que propician un aprendizaje significativo, crean actitudes positivas en los estudiantes, los familiarizan con la forma de actuar de los científicos y contribuyen al desarrollo de una valoración más integral de la realidad circundante por parte de la persona. Ejemplos de tareas de este tipo en las clases de Física pueden ser las siguientes:

-  Calcule el volumen de una piedra, puede solicitar al profesor los materiales que necesite.
-  Se tiene un bote con chatarra en un estanque, si la chatarra es botada al estanque, ¿subirá, bajará o permanecerá igual el nivel del agua en el estanque? Explique su respuesta.
- ¿Qué altura puede alcanzar un objeto que se lanza verticalmente hacia arriba?


La movilización para actuar se da en el plano inconsciente, a través de los motivos y en el consciente, a través de los intereses que se conforman en la persona. El sostenimiento de la actuación se da a través de las emociones (nivel inconsciente) y sentimientos (nivel consciente), que se van conformando en la persona como resultado de su actuación. La movilización y el sostenimiento de la actuación en los niveles consciente, o sea como intereses y sentimientos, hace que esta sea más eficiente.

Entre los factores que favorecen la movilización y el sostenimiento de la actuación de la persona están entre otros los siguientes: los estímulos positivos tanto materiales como espirituales que se le den como resultado de una actuación exitosa, el éxito en la actuación, y el reconocimiento social que se haga de la persona por su actuación.


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